sábado, 20 de enero de 2018

ALMERÍA, CATEDRAL Y MERCADO

La catedral de la Encarnación de Almería tiene aspecto de fortaleza, fue construida en el siglo XVI de esta forma para soportar los ataques de los piratas berberiscos. Con una altura inferior a lo que estamos acostumbrados, para que las bombas no impactaran en ella.



















Es de estilo gótico tardío, pero se terminó con elementos renacentistas y añadidos posteriores barrocos y neoclásicos.
Es de planta rectangular con tres naves de la misma altura , tres capillas en la cabecera y girola.

El retablo es barroco con pinturas y esculturas de gran calidad, la estructura es gótica, como se ve sus nervaduras.


Enfrente se sitúa el coro con sillería de nogal, por encima, a cada lado de la nave hay dos órganos barrocos.

La entrada a la Catedral se realiza por el claustro neoclásico rectangular, con la típica fuentecita en el centro.
Me ha gustado la visita, la he realizado con audio-guía que entra dentro del precio. Esta vez me han hecho descuento con el carné universitario, generalmente solo vale hasta los 26 años.

Después vuelta al centro de la ciudad para visitar el Mercado Central, un lugar donde disfrutar de los productos típicos de esta zona. Está cerca de la Puerta de Purchena, centro de la ciudad.
Pertenece a la llamada arquitectura del hierro de finales del siglo XIX, exactamente de 1892.

Sus artículos están perfectamente ordenados, la hilera de frutas bien apiladas, fue lo que más me llamó la atención. En uno de los puestos he visto el "tomate pata negra" del Cabo de Gata, que al parecer por las Navidades, se pone por las nubes.
Voy acompañada de unos amigos a los que les apetece darse un paseo por la zona comercial, ¡no todo va a
ser arte!
Después de un descanso, para tomar un café, en la céntrica Puerta de Purchena nos recorremos el Paseo de Almería, la calle con las tiendas más emblemáticas de todas las ciudades.


Terminamos la mañana retratándonos delante del nombre de la ciudad, al final del Paseo de la Rambla, cerca ya del Puerto.